La normativa de la pintura intumescente es un conjunto de regulaciones y estándares que garantizan la seguridad de este tipo de recubrimiento ignífugo, esencial en la protección pasiva contra incendios. Conocer y cumplir con estas normas es vital para asegurar que tu edificio o estructura cuente con la máxima protección frente al fuego.
¿Qué es la pintura intumescente?
La pintura intumescente es un recubrimiento especial que se aplica sobre superficies como acero, madera u hormigón. Su principal característica es que, al exponerse a altas temperaturas, se expande y forma una capa aislante que protege el sustrato del calor y las llamas.
Este proceso de intumescencia se debe a los componentes químicos de la pintura, que reaccionan al calor y liberan gases no inflamables. Estos gases crean una espuma aislante que puede expandirse hasta 50 veces su espesor original, retardando la transferencia de calor y evitando que el fuego se propague.
Beneficios de la pintura intumescente
- Protege las estructuras contra incendios, retardando su colapso y aumentando el tiempo de evacuación.
- Reduce la velocidad de carbonización de la madera y otros materiales, evitando su propagación y extendiendo la resistencia al fuego.
- Cumple con la normativa vigente para garantizar la eficacia y la seguridad de las estructuras protegidas.
- Ayuda a prevenir daños materiales y económicos en caso de incendio.
Diferencias entre la pintura intumescente y la pintura ignífuga
La pintura intumescente y la pintura ignífuga son dos tipos de recubrimientos utilizados a fin de proteger estructuras en caso de incendio. Si bien parecen lo mismo, tienen diferencias importantes que merecen ser destacadas:
Pintura Intumescente
- Reacción al calor: reacciona químicamente cuando se calienta.
- Espuma aislante: en caso de incendio, se expande formando una capa de espuma carbonizada.
- Aplicación: se utiliza en estructuras metálicas para protegerlas y reducir la transferencia de calor.
- Retraso del colapso: ayuda a prolongar el tiempo disponible para evacuar.
Pintura Ignífuga
- No se quema fácilmente: actúa como barrera física contra el fuego.
- Aplicación versátil: se puede aplicar en superficies de metal, madera, paredes y techos.
- Objetivo: prevenir la propagación de las llamas y favorecer la extinción.
En síntesis, la pintura intumescente se expande y protege el metal, mientras que la pintura ignífuga evita la propagación del fuego. Como elementos de protección pasiva contra incendios, ambas son esenciales en la seguridad contra incendios.
Normativa europea de pintura intumescente
La normativa europea está establecida en el Eurocódigo 5 y ha sido transferida al Documento Básico de Seguridad en caso de incendio del Código Técnico de la Edificación (CTE). Regula las condiciones de ensayo en las pinturas intumescentes y establece los parámetros necesarios para evaluar su eficacia.
Parámetros de evaluación
- Ensayos: pruebas de resistencia al fuego y pruebas de adhesión al sustrato.
- Velocidad de carbonización: valores ß’ y ß» que indican la velocidad de carbonización de la madera protegida durante un incendio.
- Sección reducida: valor k utilizado para calcular la sección residual de la estructura después de un determinado tiempo de exposición al fuego.
Normativa nacional: UNE 48287:2017
La norma UNE 48287:2017 es el pilar de la regulación de pinturas intumescentes en España. Proporciona una guía exhaustiva para la aplicación de pinturas intumescentes, asegurando que la protección del acero estructural frente al fuego sea efectiva y confiable.
Requisitos según la UNE 48287:2017
- Selección del producto: elegir un producto certificado que cumpla con los estándares de la normativa.
- Aplicación: seguir las instrucciones del fabricante y considerar factores como temperatura, humedad y espesor del recubrimiento. Verificar la compatibilidad con el sustrato de acero.
- Inspección y mantenimiento: realizar inspecciones regulares para asegurar la integridad de la pintura. Reparar cualquier daño o deterioro de inmediato. El mantenimiento adecuado prolonga la vida útil del recubrimiento.
Importancia de la certificación
- Garantía de calidad: la certificación conforme a la UNE 48287 asegura que la pintura intumescente aplicada cumple con los más altos estándares de seguridad y calidad.
- Profesionales cualificados: solo profesionales con la formación adecuada deben llevar a cabo la aplicación de estas pinturas para garantizar su efectividad y fiabilidad.
Requisitos de la pintura intumescente
Con el objetivo de garantizar la eficacia y seguridad de la protección contra incendios, la pintura intumescente debe cumplir con los siguientes requisitos establecidos en la normativa vigente.
Tiempos de resistencia al fuego
Así ismo, la pintura intumescente debe proporcionar los tiempos de resistencia al fuego fijados en la regulación, según el tipo de estructura y su uso. Estos tiempos pueden variar desde 30 minutos hasta 240 minutos, dependiendo de las exigencias del proyecto y la normativa aplicable.
Espesores de aplicación
Además, la normativa establece los espesores mínimos y máximos de aplicación de la pintura intumescente para formar una capa adecuada de protección. Estos varían según el tipo de pintura, el sustrato y los tiempos de resistencia al fuego requeridos.
Adhesión al sustrato
A su vez, la pintura intumescente tiene que adherirse de manera segura y duradera a la superficie de la estructura, evitando desprendimientos o desgastes prematuros.
Para lograr una adhesión óptima, es esencial preparar adecuadamente la superficie, eliminando la oxidación y corrosión de metales.
Características reactivas
Una pintura con las características reactivas adecuadas se expandirá rápidamente al exponerse al calor, creando una capa aislante eficaz que protegerá la estructura del fuego.
Capacidad de formar una capa termoaislante
Al expandirse, la pintura intumescente debe formar una capa termoaislante que actúe como un escudo protector, retardando la transferencia de calor a la estructura y retrasando su colapso.
La normativa de la pintura intumescente es un componente esencial para la seguridad de las estructuras en caso de incendio. Además de ser un requisito legal, cumplir con la UNE 48287 es un compromiso con la seguridad y el bienestar de las personas y las propiedades.